Anteriormente, se había mencionado que cuando la ciencia fuere dulce a tu corazón pide y te será dado, pero acá también son ofrecidos trabajos donde el Señor (quien quiera que sea) prueba constantemente fuerza de voluntad, creatividad, extremismos. Los hermosos trabajos se logran rompiendo impedimentos por medio de la organización, matando esos viejos hábitos de conducta que ciñen a la vida a un sin número de ciclos repetitivos y poco constructivos, como pereza, vagancia, conformismo. En resumen, HAY QUE LUCIRSE HOY. "Malla tras malla teje mi telar, telas para mi honra y telas para honrar".
Por otra parte, y volviendo a que los extremos son malos, lucirse no minimiza el esfuerzo de otras personas, toda labor hecha en colectivo los honra a todos, de otra forma o mal aspectado sería mirar por encima del hombre con despotismo y orgullos mal fundados y poco humanos. "No hagas juicio sin misericordia ni tengas misericordias sin juicios".
Lo mejor que cada quien puede hacer, es todo lo negativo hacerlo positivo, romper la oscuridad, dar lugar a la permuta como un elemento de progreso. "Dulce es el trabajo de quien trabaja contento, y dulce el descanso de quien lo tiene merecido"
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